Empresas de electricidad y gas solicitan una ampliación de las medidas que regulan la actual recaudación de IVA. Las normas en vigor caducan a finales de 2018. Si no se aprueban nuevas medidas, podría crecer el agujero de IVA.

Un grupo formado por las mayores asociaciones europeas de energía han reclamado al Eurogrupo que trabaje en medidas para la protección contra el fraude fiscal. Su deseo es que la actual regulación de IVA para energía no expire al final de 2018. 

Este reclamo para promover más reglas que regulen el IVA europeo ayudaría a evitar el incremento en el fraude del IVA. Esta brecha entre los ingresos esperados y los reales ascendió a 150 000 millones de euros en 2016 en todo el conjunto de la UE. 

El fraude del IVA intracomunitario amenaza el buen funcionamiento de los mercados de la electricidad, el gas y las emisiones en Europa, según advirtieron las principales asociaciones de energía. Entre ellas se encuentran Europex, Eurelectric y Eurogas. 

También recuerdan que, hasta la introducción de la excepción a la Directiva del IVA, miles de transacciones de electricidad, gas y otras energías evadían el pago de los impuestos correspondientes. 

La actual regulación permite a los Estados miembros aplicar impuestos indirectos sobre bienes y servicios energéticos, pero expira el 31 de diciembre de 2018, a menos que el Parlamento decida prolongarla.

La renovación es la única manera de prevenir la actuación fraudulenta en los mercados energéticos, según estas asociaciones. Además, inciden en que conviene preservar y regular uno de los motores económicos más fuertes de Europa. 

Medidas que pide el sector energético para el IVA intracomunitario

Regular la modificación de forma oportuna.

Ampliar la excepción a la Directiva al menos 5 años, hasta junio de 2022. 

— Incluir las Garantías de Origen como mecanismo básico. Estas acreditaciones verifican que una cantidad de energía ha sido producida por fuentes renovables o de cogeneración de alta eficiencia. 

— Exigir a todos los Estados miembros que modifiquen el mecanismo de cobro de impuestos para que la notificación de una transacción de IVA dependa del comprador de un bien o servicio, y no del vendedor. 

En marzo de 2018, la Comisión Europea informó de que, en concreto, la aplicación de la última medida —hasta ahora, de forma provisional— había reducido el fraude de forma significativa.